¿CUÁL SE TOMA SUMERCÉ?

Día a Día Cultural

Desde que abrimos los ojos por la mañana hasta que los cerramos al dormir, percibimos un mundo permeado por todo lo referente a la cultura, artes y patrimonio. En principio, ya entendemos a la cultura como un concepto dinámico y amplio, que dependiendo del filtro o el punto de vista puede considerarse distinto, pero siempre apuntando a ser una base del comportamiento personal frente al mundo, y colectivo frente al territorio. Esto quiere decir, que la cultura hace parte de la personalidad de cada quién, influenciada por tradición, entorno, necesidad de expresión, o cualquier otra necesidad social y humana.

Lastimosamente, aunque la cultura hace parte vital de una persona y de una sociedad, desde el punto de vista de las administraciones y las instituciones gubernamentales es obviada y no la priorizan como sería el ideal. Más allá de los recursos que requiere este campo, la cultura necesita ser dinamizada constantemente, revisada, retroalimentada, soportada y circulada de modo que nos permita continuar con el desarrollo de una de las características que nos convierte en seres humanos: la identidad. Y es que este es uno de los muchos beneficios que trae la cultura para una sociedad construida.

Perfectamente podríamos pasar este artículo nombrando y mencionando cada beneficio que nos aporta la cultura, las artes y el patrimonio, desde los que permiten opciones de expresión, registro, enseñanza hasta los que se enfocan en la recreación y la estética. Es todo un tema largo y extenso, pero no es el fin de este texto. Más allá de eso, la cultura está presente segundo a segundo en la vida de todos, en una medida y en una forma totalmente distinta para cada quién, y lo que se busca con este escrito es crear una consciencia sobre ello.

Erróneamente, para otros sectores económicos en el país y en varias partes del mundo, la cultura se reduce enteramente a lo recreativo: Música para ambientar, teatro como plan, danza para recrear eventos, libros para pasar el tiempo y estas son pocas entre las muchas otras percepciones actuales. Este modelo ha bajado la priorización de la cultura a grados menores, y esto se refleja en la inyección económica que se le da al campo. El Ministerio de Cultura de Colombia, en el año 2015 alcanzó un pico importante en la ejecución de recursos, pero a partir de ahí se han reducido tanto los aportes como las acciones en todos sus grupos. Ahora, teniendo en cuenta que el 2020 es un año particular debido al fenómeno biológico referente al COVID-19 que afectó al mundo, notamos una reducción exagerada en los recursos del sector opacando su importancia en el día a día del ser humano.

Muchas personas pueden decir que sin alimento o sin salud no se puede vivir, pero sin cultura sí, justo después de ver una película o leer un libro que seguramente le evitó un desespero por el encierro durante cuatro meses seguidos. Otras personas pueden inferir que el ser humano no necesita el arte para el desarrollo social, pero seguramente no tiene en cuenta que la cultura hace parte del aprendizaje y la academia desde sus raíces. El arte y el patrimonio están tan arraigados al ser humano que no se perciben en el día a día, por más que los veamos, usemos, leamos y vivamos con ellos constantemente. Y los beneficios no son exclusivamente para cada persona, sino para comunidades y grupos sociales. El patrimonio impulsa organización social y algunos desarrollos tecnológicos y estructurales. El arte registra momentos; comunica ideas, conceptos y sentimientos; enseña y transmite; funciona como terapia preventiva y curativa; desarrolla habilidades creativas aplicables en otros campos; y recrea de maneras diversas y constantes. Todo lo mencionado sucede todos los días, todo el día en la vida de todos. ¿Estamos seguros de que el arte no es necesario para la vida y su desarrollo?

#ConSumaCultura es un proyecto en redes sociales que ha intentado recordarle al mundo que el arte y el patrimonio están presentes día a día, momento a momento; que tienen una gran cantidad de agentes que crean, producen, investigan y trabajan con ello, dedicados día a día para lograr la estabilidad mencionada; y que es un sector que se encuentra en peligro por una falta de apoyo generalizada.

La pandemia que inició el año pasado, aun cuando ha resaltado todas las actividades, obras y muestras culturales en el mundo; aun cuando ha permitido la creación de nuevas maneras de supervivencia basadas en la cultura; aun cuando ha abierto una gama de formas del arte; aun cuando ha mostrado el porqué del valor del patrimonio local; ha logrado colocar la cultura en general en un punto crítico, donde ni sus agentes ni sus procesos han podido encontrar una sostenibilidad más allá que el lado recreativo.

- La cápsula azul es para seguir en el mundo donde se toma la cultura, el arte y el patrimonio como algo estrictamente recreativo y no prioritario. Esta cápsula seguramente desencadenará una crisis en el sector difícil de solventar en el futuro.

- La cápsula roja permitirá ver la realidad, donde se puede reconocer el impacto y la acción de la cultura que nos identifica y nos desarrolla más allá cada instante que pasa. Esta cápsula seguramente podrá abrir otras alternativas que permitan solventar el estado actual del sector y podrá garantizar hasta cierto punto sus beneficios en la sociedad.

¿Cuál se toma sumercé?